Qué dice Juan 16 13
La Trinidad
Dios Padre, Hijo y Espíritu Beato. Son tres, pero al tiempo los tres son Dios. Es desepcionante no poder comprender el secreto de la Trinidad, pero si la raza humana pudiese comprender absolutamente a Dios, dejaría de ser Dios, ¿no es de este modo? La criatura no puede contener al Constructor con su espíritu.
En el momento en que venga el Espíritu de la Verdad, él les guiará a toda la realidad. Juan 16:13
¿Habéis estado en algún momento en un espacio donde semeja que la realidad está oculta de nosotros? Siempre y en todo momento nos encontramos intentando de tomar resoluciones en la vida como: ¿con quién nos casaremos? ¿Qué haremos tras la facultad? ¿Qué situación debemos tomar? ¿En quién tenemos la posibilidad de confiar? ¿Quién nos comunica la realidad? ¿Quién nos engaña? ¿Deberíamos mudarnos o quedarnos aquí?
Como humanos, nuestra aptitud para elegir cuál es la opción mejor tiene límites. No obstante, como fieles, nos encontramos llenos del Espíritu Beato que nos guiará a toda la realidad. El Espíritu de la Verdad sabe de nosotros, de nuestra familia, de nuestros amigos y de todo el mundo. Nada está oculto al Señor. Pues somos sus hijos, poseemos ingreso a él, y él nos guiará por el sendero acertado.
Reflexión: Juan 16,12-15
El Espíritu Beato es una fuerza que inspira, comunica, revela y anima. Es como resultado o consecuencia de su participación en nuestra historia que la Iglesia sigue con vida en el tiempo, en ocasiones desperdigada, en ocasiones errante o amarga o polarizada, pero siempre y en todo momento marcando la pauta de un persistente sendero hacia la perfección. Indudablemente, se cometieron varios fallos, como en todo trabajo donde participa el libre albedrío de la gente, no obstante, siempre y en todo momento ha predominado la aptitud de autocrítica, de corregir e incluso de resarcir, enmendando y pidiendo perdón. Es el Espíritu Santurrón quien lo anima, lo resguarda y le da esta aptitud de recrearse y corregirse, manejando a toda la raza humana, el Pueblo Escogido, a la Vida Eterna. Su crónica no estuvo exenta de enormes óbices y adversidades, contradicciones, fallos y horrores, pero asimismo de enormes ejemplos que supieron relucir en los instantes mucho más bien difíciles, señalando el Sendero del Señor. Es obra del Espíritu Beato, como lo fue la redacción de los Evangelios, la selección de los autores de los medios, la selección de los contenidos escritos y las traducciones. Es la palabra de Dios obtenida en los libros contenidos en la Biblia, mediante la inspiración y soplo del Espíritu Santurrón. Pues ninguno de estos libros brotó de la nada y, no obstante, su sabiduría, hermosura y calidad literaria son reconocidas por todo el planeta, sin distinción de religión, temporada o nacionalidad. Aun el día de hoy, la Biblia es el libro mucho más editado y anunciado en el planeta. Absolutamente nadie puede denegar su valor, y cualquier persona que se acerque a él con honestidad y humildad está cegado para conocer la Verdad, ya que esa es sus páginas de principio a fin. Y es la Palabra de Dios, que tiene la aptitud de llegar a todos, llenando el vacío o el interrogante que procuraba. Con independencia de la temporada, la nacionalidad o la condición popular, la Biblia tiene respuestas a todas y cada una de las cuestiones que los hombres se hicieron o se van a hacer en algún momento. Y esa, de hecho, es la Palabra de Dios confirmada por nuestro Señor Jesucristo, su Hijo, que vino a revelarnos que él es Dios su Padre, que lo envió para socorrer, como lo prometió a su pueblo. por boca de los profetas, lo que logró, de hecho, llegado el instante, muriendo y resucitando por nosotros, poniendo finalmente su pacto con nosotros. En el momento en que venga el Espíritu de la Verdad, les presentará toda la realidad, por el hecho de que no charlará por sí solo, sino charlará lo que escuchó y anunciará lo que va a suceder.
Si leer otros artículos relacionados a Qué dice Juan 16 13 puedes visitar la categoría Biblia.
Deja una respuesta