Quién vende a Dios

Mateo 27.9-diez afirma: “De esta manera se cumplió lo que se dijo por el profeta Jeremías, en el momento en que ha dicho: Y han tomado las treinta piezas de plata, precio del que era respetado, con arreglo al precio que establece los hijos de Collins. Israel; y los trajeron al dominio del constructor, como me lo mandó el Señor. No obstante, en el momento en que observamos esta profecía en el libro de Jeremías, poseemos contrariedad para hallarla. En Jérémie, este no semeja ser la situacion.

El inconveniente que debemos contestar es que no hay referencia a «treinta piezas de plata, el valor de las estimaciones» en ninguna una parte del libro de Jeremías y que en Zacarías 11-12-13 observamos: «Ellos pesaba treinta piezas de dinero gracias a mi salario, y el Señor me ha dicho: “Echalo en la tesorería; verdaderamente me respetaban».

5: ¿Jesús conoció a Judas bastante antes de transformarse en su acólito?

(Fotografía: Hemeroteca PL)

Los evangelios apócrifos (esos no reconocidos por la Iglesia, por su carácter fabuloso o por su falta de fundamento teológico) no obstante sirvieron como una fuente mucho más para reconstruir el perfil hipotético de Judas. el género de monedas que recibió Judas por la traición.La primera cosa que hay que tener en consideración es que es bien difícil detectar el origen exacto de Judea, antes que se transformara en provincia romana en el año 6 d.C. bajo el control de los persas, Alejandro Magno, el Egipto tolemaico y los seléucidas. La élite gobernante cambió, se introdujeron novedosas monedas, con lo que es bien difícil comprender precisamente qué monedas se usaron como medio de pago.

No obstante, los estudiosos presentaron 2 probables hipótesis. La primera es que podrían ser estadistas helenos. Los estadistas fueron el elemento mucho más apreciado citado en el Nuevo Testamento. Primero fueron valorados en oro y después en plata por Felipe II y Alejandro Magno, y siguieron circulando bastante tras su muerte. En este sentido, merece la pena indicar un pasaje de Mateo (17,27) en el que se detalla de qué forma Pedro halló, en la boca de un pez, una moneda que sería un estadista, con la que pagaba el impuesto de forma anual. al Templo de Jerusalén. . Por este motivo, ciertos autores llegaron a la conclusión de que las treinta monedas podrían ser estadistas.

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Juan de Jesus

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