Cómo interceder por la familia

Es una bella bendición tener la posibilidad de medrar en un hogar donde la oración es una parte de la vida día tras día. Su relevancia reside en el ejemplo de los progenitores a los hijos. Hace más fuerte la unidad y los vínculos de familia aprendiendo a rezar en todas y cada una de las temporadas de la vida con la familia.

La oración familiar aparece de la escucha de Jesús, de la lectura y del conocimiento de la Palabra de Dios. “La religión consigue su mayor fecundidad en el momento en que se vive en interacción con el resto, y frente todo con el cónyuge y los hijos, que son, en verdad, nuestra primera red social de vida, nuestra Iglesia doméstica” (Cic, 1655).

¿Para quién es este modo de rezar?

En la Palabra de Dios está dicho: «Dejad todas y cada una vuestras intranquilidades a Dios por el hecho de que él protege de nosotros» (1P 5,7). Bueno, si andas preocupado pues los que amas viven una vida amarga, teniendo enormes inconvenientes, viviendo un auténtico infierno en su historia que los está demoliendo cada días un poco más y no tienes idea de qué manera asistirlos… ¡Esta oración puede guiarte!

Puede contribuir a las mamás que están preocupadas por sus hijos que tienen la posibilidad de volverse alcohólicos, drogodependientes o rebeldes. Para ti, mujer, que padeces por un marido infiel, alcohólico, fallido. Para ti, marido, que te enteras que tu mujer está en inconvenientes y no tienes idea de qué forma asistirla. Para los que tenéis fuertes adversidades en vuestra familia con nuestros hijos, tu yerno, vuestra nuera… Para nosotros, que querríais contribuir a un hermano, a un amigo, a un amigo.

La oración incentiva la comunicación y la conciencia espiritual

Estas son ciertas cosas que ve como producto de la oración incesante y eficiente con y por su familia:

• Incrementa seguridad y apertura para comunicar luchas, temores y mucho más.
• El desarrollo espiritual de la familia y las chances para que sus hijos se conecten con su fe.

Cinco formas de rezar

Asimismo ustedes cooperaron con nosotros mediante sus frases, a fin de que bastante gente logren ofrecer gracias por nosotros por el obsequio que las frases han enviado bastante (2Co 1 :11).

Como varios integrantes de la iglesia, andas complacido por tu pastor. Desea realizar algo para enseñar su aprecio, pero no está seguro de qué la asistiría mucho más. Como mujer que fué ministra a lo largo de varios años, ¿puedo ofrecerle un consejo? Mucho más que una comida fuera, mucho más que un cumplido verbal, mucho más que algún otro obsequio que logre ofrecerle a un pastor (salvo quizás una semana de cacería de levantes en Wyoming – ¡pregúnteme de qué manera lo sé!), va a apreciar sus frases. familia.

Oren asimismo por su comunicación sin expresiones.

Ore a fin de que hable la realidad del evangelio a su familia por medio de su accionar respetuoso y santurrón, que se va a leer, va a marcar y desmantelará tanto, ahora menudo mucho más, que las expresiones que puede decir.

Con frecuencia es mucho más bien difícil para nosotros establecer diálogos abiertas sobre el evangelio con nuestros conocidos cercanos. Existen muchas causas para ello, incluyendo la contrariedad de equilibrar el respeto con las responsabilidades que implica. relaciones familiares intergeneracionales. Pero conocemos realmente bien a los que están muy cerca nuestro y no tenemos la posibilidad de ocultarnos de ellos, la fe que deseamos comunicar con ellos siempre y en todo momento va a ser juzgada por el carácter que les exponemos. Por ende, debemos rezar por los amigos. ser presentados como vidas sanas, reales, interesantes, como las de Cristo: la realidad viva que afirma bastante sobre el evangelio en el que suponemos, tal como la realidad hablada que aguardamos comunicar con ellos asimismo.

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