Cómo se reconoce a la Iglesia verdadera

La mucho más primordial de las tres fabricantes de una auténtica iglesia es la predicación pura del Evangelio. Sin la predicación del Evangelio, no hay iglesia.

Observamos esto en el ejemplo de nuestro Señor, quien empezó su ministerio terrenal predicando – «Desde ese momento Jesús empezó a predicar: ‘Arrepentíos, por el hecho de que el reino de los cielos está cerca de él’. «» (Mt 4,17) – y acabó mandando a sus apóstoles a predicar y seguir su obra – «Id, ya que, y haced acólitos a todas y cada una de las naciones… enseñándoles a almacenar todo cuanto he mandado; ¡Y recuerda! Yo voy a estar con nosotros para toda la vida, hasta el objetivo de todo el mundo» (Mt 28, 19-20).

Índice
  1. De qué forma Pablo fue engañado
    1. Es dependiente de la obra del Espíritu Beato (1 Corintios 12:
    2. Pero ten precaución con las iglesias falsas

De qué forma Pablo fue engañado

El apóstol Pablo es un caso de muestra tradicional de un hombre que aprendió Por su experiencia, Pablo era fariseo, integrante de entre los conjuntos judíos mucho más rigurosos de su temporada, era franco en lo que creía y practicaba

Resumió su celo y consideró las reglas que había aprendido como fariseo:

Es dependiente de la obra del Espíritu Beato (1 Corintios 12:

La auténtica Iglesia admite que la obra del Espíritu es precisa y también importante para la predicación, enseñanza, y el buen desempeño de los ministerios.

En los servicios se puede gozar de la alegría y vitalidad de estos Leis, no hablo de situaciones de chillidos o saltos, pero la presencia del Señor en el servicio de adoración es clara. del Espíritu Santurrón en un fiel es importante cap asimismo.

Pero ten precaución con las iglesias falsas

Todas y cada una de las iglesias tienen fallas y están equivocadas hasta un punto. Pero aún es esencial tener la enseñanza adecuada. La iglesia tiene cosas esenciales que llevar a cabo bien. En caso contrario, es una iglesia falsa que tienes que eludir. Entendemos que este inconveniente verdaderamente existe, pues la Biblia nos comunica que “falsos profesores va a haber entre nosotros” (2 Pedro 2:1).

Este versículo da la primera pista esencial sobre de qué forma advertir una iglesia falsa: mira a sus líderes. Es arriesgado sacar conclusiones sobre una iglesia tras comprender solo a unos pocos integrantes. Tienen la posibilidad de ser espiritualmente inmaduros. Esto no ha de ser utilizado en oposición a la iglesia, pues una iglesia jamás puede obligar a sus integrantes a opinar y actuar precisamente como enseña, ¡y jamás debería estimar llevarlo a cabo!

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Juan de Jesus

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